Sunday, April 28, 2013

Tramposería sale



No se sabe cuando comenzó todo. Poco a poco nos fuimos dando cuenta de que algo malo estaba pasando. La naturaleza siempre avisa. La sequía comenzó a poner toda la vegetación amarilla. Hubo incendios aquí y allá. Según el pronóstico, las lluvias vendrían pronto y la hierba comenzaría a reverdecer.

Hay una gran desazón en el ambiente. Tan grande que si la lluvia cayera ahora mismo le costaría mucho amainar.

Cuando era un niño, en los campos de béisbol, había días en que nos daba por hacer trampa en una decisión del árbitro, que no era otro que nosotros mismos. En ese momento alguien (del bando de los agraviados por la decisión) saltaba y gritaba, para acabar con la discusión que paralizaba el juego: “¡Está bien, déjenlo así que ´tramposería sale´!

En el transcurso, algo ocurría a favor de los perjudicados por la trampa. Era como un designio de Dios, una ley. De tal modo que al final, nadie dudaba que cuando alguien había dicho ´tramposería sale´ algo inevitable pasaría más adelante para revertir la trampa.

Como resultado de ello, cada vez las trampas eran menos. Aprendimos que si la hacíamos, más temprano que tarde la pagaríamos por algún designio del cielo.

En momentos como los que vivimos no dejo de recordarlo, y de saber que en algún momento las cosas tomarán el rumbo correcto, sin que podamos hacer nada para evitarlo. En el ínterin podremos ver movimientos que en nada cambiarán el curso de los acontecimientos. Simples pataleos de ahogado. El designio del cielo volverá a imponerse. Como era en el principio, ahora y siempre…

Nota del autor: “Tramposería” tiene un equivalente en el diccionario de la RAE: trampería.
*Imagen: www.prensalibre.com

4 comments:

Susie said...

Me encantó!!

Oswaldo Aiffil said...

Hola Susie! Gracias! Las leyes naturales siempre terminan por cumplirse. Un beso grande!

RosaMaría said...

Ciertamente que es asi! Muy bueno. Besos

Oswaldo Aiffil said...

Ha sido una dura lucha RosaMaría, seguro de que quien a Dios tiene nada le falta. Un beso grande!