Sunday, September 27, 2009

Manual del buen mesonero

Hace poco me fui un poco enfadado de un bar y restaurant donde el camarero me presionaba a tomarme unas cervezas. No dejaba nunca que el vaso se vaciara, se acercaba y lo llenaba, y luego se apresuraba a pedir la siguiente, por medio de un insistente: “¿le traigo la otra?”.

Regularmente suelo visitar muchos restaurantes, tanto de la ciudad donde vivo como de las que visito. Y en cada uno de ellos suelo encontrarme con todos los tipos de mesoneros (meseros, camareros) que se puedan imaginar.

Uno, como cliente, va estableciendo preferencias en unos, que no en otros, dependiendo de muchos factores, tales como el respeto, la memoria al momento de tomar los pedidos, la satisfacción por el servicio prestado, la presentación personal y la cortesía de cada uno de ellos.

Yo tengo mis preferidos, y me preocupa que no exista una especie de manual de etiqueta, para que esos que no me gustan pudiesen aprender y superar sus fallas en el servicio.

Cada quien en su fuero interno tiene una especie de mapa con la definición de las características de un buen mesonero, y a partir de la misma se queja cuando el servicio no se realiza correctamente.

Revisando en internet pude encontrar un documento anónimo, en el cual se puntualizan las características de un buen camarero, el cual publico a continuación para que de algún modo contribuya a mejorar el servicio:

CUALIDADES
SENSIBILIDAD ARTÍSTICA

El Mesonero de Mesonero que ama su profesión y vive para ella, va atesorando conocimientos, experiencias y va refinando su gusto, aunque no posea el don de la sensibilidad artística, la adquiere.

Todos deben tratar de superarse y no sólo de continuar por el camino que otros han trillado, debemos hacer o tratar de realizar algo nuevo.

BUENA EDUCACIÓN

El mesonero necesita una educación a toda prueba porque trata a diario con un público variado, es decir de todas las capas sociales, de diferente educación y temperamento.

Necesita también, un control inmenso en sus reacciones. Ese trato a diario con personas diferentes, los obliga por lo tanto, a tener que sortear muchas dificultades, manteniéndose inalterable.



MEMORIA

El hombre está caracterizado por su memoria. Ninguno es más grande o más pequeño que su memoria, él no puede levantar un peso mayor del que le permita sus fuerzas, del mismo modo que un banquero no puede dar más dinero del que tenga en el banco. Ninguno puede ir más lejos que su memoria. La memoria no es otra cosa que la llamada evocación del pasado, de hechos, de las palabras y de los acontecimientos que han sido depositados en la mente. Es el almacén donde colocamos en reserva, los conocimientos hasta que deseamos utilizarlos.

Recordar cosas que han sucedido en el pasado, evitará al empleado la necesidad de estar preguntando a cada rato. Para tener una buena memoria es necesario cultivarla, ejercitarla y sobre todo interesarse en ello.

Se debe poner atención a lo que se hace o se escucha. La atención es el interés en lo que se está haciendo. Si su memoria es pobre, la causa debe buscarse en la falta de atención. La asociación es un escalón necesario para el desarrollo de la memoria. A una persona debe asociársele con su negocio, la profesión o el lugar en que se le conoció.

CORTESÍA

Entra en la formación elemental del hombre civilizado, pero no se puede negar que a veces nos olvidamos de ella y esto podría perjudicarnos; el mesonero debe mostrarse cortés por si mismo haciendo de ello un hábito.

Cuando se trata con cortesía a los demás, esperamos lo mismo de ellos. En cualquier profesión, un servicio se agradece más cuando va acompañado de cortesía.

TACTO

Constituye un secreto el hecho de saber lo que se debe decir, cómo decirlo; en el momento más oportuno y preciso. Un mesonero puede tener habilidad, y sin embargo no llegar al éxito en su profesión, por causa de la falta de tacto al tratar con la gente.

Este aspecto del carácter es susceptible de cultivarse, el contacto social, la
experiencia y la educación, son factores esenciales.

Se debe cultivar el tacto porque sin él no se puede tener ninguna significación ni prosperar; en cambio, si se posee esa cualidad, muy pronto se observará como hacemos amigos rápidamente y lo más importante es seguirlos conservando.

DISCRECIÓN

Uno de los valores humanos sin duda más cotizados en nuestra actividad es la discreción. El mesonero se entera con suma facilidad de multitud de datos referentes a todas las órdenes: sociales, políticos, de negocios, etc. No sólo por virtud debe callar, debe hacerlo por conveniencia.

Siempre la indiscreción producto de comentarios desafortunados, originan perjuicios; por el contrario, la discreción nos colma de satisfacciones y nos recompensa ampliamente en la estimación de la clientela.

SENTIDO CRÍTICO Y ESPÍRITU DE OBSERVACIÓN

El personal del comedor necesita gran sentido crítico y espíritu de observación para conocer la clientela.

No puede atenderse de la misma forma a un cliente exigente que a uno tolerante; a una señora entrada en años que a una joven señora o señorita. La forma en que se nos hace el pedido da la pauta para lo demás.

Como el ayudante necesita un control estricto de sus reacciones, ese sentido crítico y espíritu de observación, le indicará cuándo y en qué momento puede sortear una dificultad, manteniéndose inalterable y solucionándola con habilidad.

SIMPATÍA

Es lógico que la persona que no se sienta bien entre los demás, no les caiga bien, no despierta su simpatía. La persona sociable agrada, mientras la insociable, no interesa a los demás. Una muestra de sociabilidad es la sonrisa, sin la cual será difícil relacionarse y conseguir amigos.

SISTEMA Y ORDEN PARA EL TRABAJO

Un buen organizador se nota enseguida. En cada trabajo, por pequeño que sea, la mente organizativa encuentra como sistematizar mejor la ejecución, de ahorrar tiempo y de simplificarlo.

ADAPTABILIDAD

La persona de fácil adaptación tendrá menos problemas en el trabajo. A veces, la empresa no está en condiciones de facilitar enseguida todo cuanto se necesita para realizar las tareas, sin embargo, se tendrá que adaptar y es mejor hacerlo con buen humor.

La adaptabilidad se refiere también a nuestra relación con las personas que nos rodean; con nuestros superiores y con nuestros clientes.

INICIATIVA

Son muchas las oportunidades en el trabajo donde se puede demostrar el espíritu de iniciativa. El trabajador que labora con iniciativa, si no tiene otra tarea que realizar, busca emplear útilmente su tiempo y demostrar el espíritu de superación.

ECONOMÍA

La empresa debe controlar, no solamente la calidad del trabajo, sino también el costo del mismo.

El empleado que requiere de menos supervisión, no pierde el tiempo inútilmente, necesita de menos tiempo para terminar su trabajo, no maltrata el equipo y lo cuida para que dure más; no desperdicia por descuido el material que usa; resulta para la empresa más conveniente que otro empleado que no considere el trabajo desde el punto de vista económico.

LEALTAD

La lealtad es una característica del hombre honrado, en donde la pasión por los principios morales predomina sobre los intereses materiales.

El empleado leal resguarda los intereses legítimos de la empresa.

RESPONSABILIDAD

La ética profesional, como veremos más adelante, regula desde el punto de vista moral toda nuestra actitud relacionada con las obligaciones para con la empresa y su personal, con los clientes y el público en general, con el estado, con el trato decoroso a las empresas competidoras. El comportamiento ético es una conducta honesta.

CONFIANZA EN SÍ MISMO

La confianza facilita el trabajo y lo convierte en un placer. La persona segura de sí misma influye en otros con su personalidad y confianza.

La confianza en sí mismo y la fe en el porvenir, crea el entusiasmo y la fuerza para construir y conquistar metas.

SALUD

Una salud perfecta es la base de una personalidad atrayente. Las siguientes recomendaciones lo ayudarán a sentirse saludable, ágil y dispuesto.

Haga una dieta moderada, sencilla y adecuada

Duerma por lo menos de 7 a 8 horas diariamente.

Realice ejercicios moderados de acuerdo a su edad y condición física.

Efectúese un examen físico general cada seis meses.

Tenga el Certificado de salud vigente.

Mantenga una atención especial a su higiene personal.

APARIENCIA PERSONAL

A continuación se mencionan algunos aspectos que el ayudante debe cuidar:

Uñas: deben recortarse cada vez que su crecimiento llegue al punto de oponerse al aseo y mientras no se recorten, examínense a menudo, para limpiarlas en el momento en que hayan perdido su blancura natural, pero eso sí, nunca delante de los clientes.

El largo de las uñas será el normal, ni muy largas ni tan cortas que lleguen a lastimar la parte adherida a los dedos. Nunca, deberá recurrirse a los dientes como cortaúñas; es una falta grave de aseo, por cuanto así se llenan los dedos de saliva y los gérmenes que ésta contiene los transmite a todo lo que toca.

Cabello: debe cortarse el cabello por lo menos cada quince días y lavado cada vez que sea necesario. Los olores, el humo y la transpiración normal ensucian el cabello. Como estos se desordenan tan fácilmente, es necesario peinarse con frecuencia, pero nunca delante de los clientes, ni en las áreas del servicio.

El Aliento: debe evitarse el mal aliento, si no es suficiente para eliminarlos la limpieza normal, será preciso visitar a un dentista o a un especialista (gastroenterólogo).

Emanaciones del Cuerpo: son fáciles de evitar adquiriendo el hábito de una ducha diaria y en caso necesario, utilizar desodorantes eficaces o algún otro producto médico, que elimine los malos olores producidos por las impurezas del cuerpo.

La Cara: la expresión de la cara es muy importante. Esta debe estar siempre limpia. El hombre debe rasurarse diariamente y algunas veces hasta dos al día. No hay nada más desagradable que esa sombra que da a la cara una barba renaciente.

Vigile los lagrimales y los ángulos de los labios, porque existen personas que en este sitio se les acumulan humores y humedad muy repugnantes a la vista del cliente. No deje que el sudor de la cara se vea; séquela constantemente con el pañuelo, y cuide igualmente de lavarse la cara, cada vez que la transpiración haya aumentado por algún trabajo fuerte o por cualquier otra
causa. Todo siempre con el mayor recato y preferiblemente fuera de la vista del cliente.

Dentadura: debe cuidarse que la dentadura esté completa. A los clientes les desagrada ser atendidos por personas a quienes les falta piezas o presentan los dientes con caries. Vigile y cuide su dentadura.

Manos: las manos sirven para casi todas las operaciones del trabajo y son por lo tanto la parte del cuerpo más expuesta a perder su limpieza. Lávelas con frecuencia, recuerde que por ellas se transmiten microbios.

Es un signo de mala educación y una falta de aseo, el humedecerse los dedos con saliva para facilitar la vuelta de las hojas de un libro o separar varios papeles; pero más aún lo es cuando se trata de contar papel moneda. Jamás emplee los dedos para limpiarse los ojos, oídos, dientes y mucho menos las fosas nasales. Use siempre un pañuelo.

Ropa: debe estar limpia y adecuada. La limpieza no es la única condición que impone el aseo; es necesario cuidarla y no llevarla rota ni ajada. Se recomienda cambiarla diariamente.

Calzado: algunas personas descuidan la limpieza del calzado; esta parte del vestido contribuye también al lucimiento de la persona.

Para su trabajo escoja un calzado cómodo, con tacones de goma, que le permita estar de pie por bastante tiempo.

De padecer molestia en los pies, visite a un quiropedista, quien podrá corregir y aliviar la mayoría de dichas molestias.

Es importante observar y recordar que la ausencia de cualquiera de las cualidades enumeradas anteriormente, puede obstaculizar el avance de su carrera profesional.

Si usted desea hacer algo por su porvenir profesional, tiene que analizar con más detenimiento el inventario de su personalidad y tratar de mejorar ciertas cualidades o incorporar otras que su empresa y la sociedad consideran importantes.


Friday, September 25, 2009

Un día particular


“Un día particular. Encontrarse y decirse adiós”


Verdaderamente el sábado pasado fue un día muy particular. Por primera vez, después de muchos contratiempos, fui a ver a una gran amiga en escena teatral. Y la experiencia fue realmente hermosa y cautivante.


En palabras de su director, Giovanni Reali: “Dos seres marginados, etiquetados y excluidos se encuentran en este singular día.
Se descubren para desahogarse, volcar sus temores y sueños venidos a menos…para darse cuenta quiénes son y qué están haciendo con sus vidas…para otorgarse el permiso de experimentar y romper prejuicios trazados por un entorno alienante.
Sirva esta historia para ponderar que no importa lo que seamos, siempre debemos darnos la oportunidad de vivir, con libertad, nuestros errores y aciertos.”


Se trata de una obra de teatro singular, que muestra a una pareja que, por azares del destino, se encuentran y se descubren mutuamente, mostrando entre otras cosas su lado oculto, para finalmente converger en lo que son en realidad: dos seres deseosos de vivir la vida más allá de los prejuicios sociales.


Mi amiga es Roberta Zanchi, excelente actriz, quien junto a Antonio Urdaneta, son los protagonistas de esta pieza original de Ettore Scola, con Carlos Montilla, quien entrega su voz como el locutor de la radio. Esta obra tuvo su versión cinematográfica, estrenada en 1977, presentando en su momento a dos gigantes de la actuación: Sophia Loren y Marcello Mastroianni.


La pieza teatral, inicialmente ambientada en la Italia previa a la Segunda Guerra Mundial, justo cuando Hitler visita a Mussolini en 1938, trasciende las épocas y hoy en día está más vigente que nunca y retrata, tal vez sin proponérselo, la situación política actual en América Latina y el mundo, y el cómo influye con determinación sobre nuestra conducta en el día a día.


Se presenta actualmente en Caracas en el “Espacio Plural” del Teatro “Trasnocho Cultural” del Paseo Las Mercedes, los días viernes y sábado a las 9:00pm y domingo a las 7:00pm. ¡Se las recomiendo ampliamente, de todo corazón! Felicitaciones a Roberta, Antonio, Carlos y a Giovanni.

Saturday, September 19, 2009

Cuatro velas, cuatro años...

Cuatro velas, que representan la paz, la fe, el amor y la esperanza (que nunca se pierden).

Cuatro años transcurridos desde el primer post de esta casa virtual. Muchas lunas, mucha agua ha corrido bajo el puente.

A poco de empezar, el mundo blog vivió un intenso auge, un crecimiento impresionante que se tradujo en múltiples visitas e intercambios que nos llevaron a los más insospechados confines, a conocer gente especial que habita en este planeta, y que, de no haber sido por la bitácora, quizás nunca nos hubiésemos sentado a conversar cosas harto interesantes.

Sin ese toque virtual nunca hubiese sospechado que detrás de esas hermosas letras latía un corazón grande y hermoso, una vida, un ser que transmite una bondad muy bonita de percibir.
Hoy en día muchos de ellos ya no están, sus bitácoras están cerradas, o abandonadas, desconectadas. Se percibe muy poca actividad. Un sentimiento de no querer ser incluido en el ejército del 1.0 (léase uno punto cero) y de correr a formar parte de la llamada web 2.0 (léase dos punto cero), no importa con qué objetivo. Se siente caminar por un desierto donde, claro, sigue habiendo vida, pero cuesta un poco encontrarla. ¿Adónde se habrán ido? Muchas veces me hago esa pregunta.

Recuerdo que cuando comenzaba en este navegar, había un blogger que tenía un slogan que decía algo así como: “Ten una vida propia, luego bloguea”. Cuánta razón había tras las letras de ese caballero. Es que, si no vives, ¿qué puedes bloguear?, ¿qué vivencia puedes compartir?, ¿qué poesía puedes escribir?

Cuatro años después puedo decir que he madurado mucho el significado de escribir en una bitácora. Y hoy más que nunca puedo decir que adoro lo que hago, y que me encanta seguirlo haciendo. Seguir caminando por este desierto pedregoso, donde, aparte de las piedras y arena por montones, de los lagartijos y las serpientes mimetizadas con el entorno, puedes encontrar, como “El Principito”, árboles de Baobabs, verdaderos oasis, peregrinos, gente buena, un cielo de un hermoso azul en el día, y con todas las estrellas en la noche.

Agradezco profundamente sus muestras de cariño a lo largo del trayecto recorrido, sus consejos, sus correcciones, sus alegrías y tristezas compartidas.

El desierto es enorme, amplio y misterioso, y en sus arenas, cual bereberes, nos seguiremos encontrando. Un beso enorme a las damas y un abrazo grande a los caballeros. Por aquí seguiremos compartiendo hasta que Dios diga…

Saturday, September 12, 2009

¡Betty! ¡Has vuelto!


Dice un poema Zen: “Los gansos no se proponen reflejarse en el agua; el agua no piensa recibir su imagen”. Todo sigue un ritmo desconocido para nosotros, que no es otro que el que mueve al Universo.

Lo que va a suceder, sucederá, y lo que no, jamás acontecerá.

Tuve la suerte de volver a unir mi camino al de Betty, quien fielmente cortaba mi cabello desde hace unos 12 años, y cuya huella había perdido momentáneamente. Lo deseaba, quería volver a verla y que siguiera la tradición.
Escribí un post sobre el tema hace un tiempo.

Ahora he tenido esa bendición y lo agradezco infinitamente a Dios.
Betty es alguien especial.

Sunday, September 06, 2009

Las praderas de Abejales

Abejales es un pueblo olvidado, como tantos otros en Venezuela. Pero no por ello menos hermoso. Pertenece al estado Táchira, ubicado al suroeste del país. Gente tranquila, dedicada a lo que sabe, la ganadería, la agricultura y la piscicultura. Sus praderas, conocidas localmente como "bancos", le dan un toque especial al paisaje. Hace calor pero la fresca brisa lo calma, mucho más sabiendo que estamos en el piedemonte andino.
Lo visité una vez y quedé enamorado del paisaje. Ahora regresé y no puedo estar más feliz. Las fotografías hablan por sí solas.