Friday, August 31, 2007

Blog Day 2007: escribir, leer, compartir y dar gracias...


El titulo resume lo que pienso cuando tengo en mente este blog que escribo para ustedes desde Caracas, Venezuela.



Felicidades a todos los bloggers del mundo, abrazos a los caballeros y besos a las damas, en esta casa virtual se les recibe hoy con café, te e infusiones, se les agradece la buena vibra que traen y que alimenta este ambiente y, como es el estilo por aqui, se les regala algo para que se vayan reflexionando.



En este caso se extrae de un prólogo de Don Quijote de La Mancha, del gran Miguel de Cervantes y Saavedra, en la edición de la serie roja de editorial Alfaguara, escrito por Don José Saramago, premio Nobel de Literatura:



"La curiosidad empujó a Alonso Quijano a leer, la lectura le hizo imaginar, y ahora, libre de las ataduras de la costumbre y de la rutina, ya puede recorrer los caminos del mundo. comenzando por estas planicies de La Mancha, porque la aventura, bueno es que se sepa, no elige lugares ni tiempos, por más prosaicos y banales que sean o parezcan."



¡Se les quiere mucho por estos lares de Dios!

Tuesday, August 28, 2007

¿IMAX en Caracas? ¿Deseos si preñan?


Un teatro IMAX ¿será realidad este año en Caracas? ¿Deseos si preñan?

Saturday, August 25, 2007

Cómo escribir un poema chino.



A un famoso poeta japonés le preguntaron en cierta ocasión cómo se componía un poema al modo chino.

“El poema chino corriente consta de cuatro versos”, explicó. “El primer verso contiene la frase inicial; el segundo, la continuación de esa frase; el tercero rompe con el tema y da entrada a uno nuevo; el cuarto verso sintetiza los tres anteriores”.

Una canción japonesa ilustra esto:

Dos hijas de un comerciante en sedas viven en Kyoto.
Veinte años tiene la mayor; dieciocho la pequeña.
Un soldado puede quitar la vida a un hombre con su espada.
Pero estas muchachas matan con sus ojos.
*Fuente: "Carne de Zen, Huesos de Zen", uno de mis libros de cabecera.

Wednesday, August 22, 2007

Ningún viaje es definitivo...


Hace muchísimos años, digamos que unos veinticinco, cuando estaba en mi etapa universitaria, solía visitar la librería “Divulgación”, del amigo Sergio Alves Moreira, portugués de nacimiento y ciudadano del mundo. El local del señor Alves, en Los Chaguaramos, Caracas, no tiene la exclusividad de grandes anaqueles como las librerías modernas, sino que más bien éstos (los anaqueles) están combinados con grandes mesones en los cuales descansan cientos de títulos literarios, científicos y de arte. Pareciera que están colocados de manera aleatoria, sin ningún orden, pero nada más alejado de la realidad. Basta que le pregunten por un titulo para que él se dirija directamente hacia la mesa donde éste yace y lo encuentre fácilmente.

Tuve la dicha de tener interesantes conversaciones con Don Sergio, algunas de ellas sobre la lengua y cultura portuguesas. Como buen librero, termina conociendo, milimétricamente, a los clientes y sus gustos. Un buen día me dijo: “Compra este libro, allí leerás buen portugués y a la vez te deleitarás con las imágenes de mi país de origen”. En mis manos un ejemplar de presentación impecable. Adentro guarda lo más importante. Al leerlo no terminas de saber quien dice más, si las imágenes o la rica prosa de José Saramago, premio Nobel de Literatura en 1998.

El libro en cuestión se llama “Viagem a Portugal”, de editorial Caminho, con fotografías de Mauricio Abreu. Una delicia, un tesoro. Del prólogo, extraigo estas palabras, o más bien consejos de Saramago para los lectores del libro:

“Viaje según su proyecto propio, dé mínimos oídos a la facilidad de los itinerarios cómodos y de rastro pisado, acepte equivocarse en la carretera y volver atrás, o, al contrario, persevere hasta inventar salidas desacostumbradas al mundo. No tendrá mejor viaje. Y, si se lo pide la sensibilidad, registre a su vez lo que vio y sintió, lo que dijo u oyó decir (…) La felicidad, sépalo lector, tiene muchos rostros. Viajar es probablemente uno de ellos. Entregue sus flores a quien sepa cuidar de ellas, y empiece. O reempiece. Ningún viaje es definitivo.”

¿Consejos para el viaje o para la vida misma?
*Fotografía del post: Sintra, Portugal.

Saturday, August 18, 2007

Para que lo sepas...


Ese otro que también me habita,
acaso propietario, invasor quizás o exiliado en este
cuerpo ajeno, o de ambos,
ese otro a quien temo o ignoro, felino o ángel,
ese otro que está solo, siempre que estoy solo, ave
o demonio,
esa sombra de piedra que ha crecido en mi adentro
y en mi afuera,
eco o palabra, esa voz que responde cuando me
preguntan algo,
el dueño de mi embrollo, el pesimista y el melancólico
y el inmotivadamente alegre,
ese otro, también te ama.

Poesía de Darío Jaramillo Agudelo, Antioquia, Colombia
Pintura de Amedeo Modigliani: "Pelirroja en vestido de noche", 1918.

Saturday, August 11, 2007

Los cuatro acuerdos...


¡Hola a todos! He estado un poco desaparecido de los blogs. Bastante ocupado con mi nuevo trabajo. En adaptación constante. También estoy leyendo bastante durante los fines de semana.
Ya terminé “La historia de la mujer convertida en mono. Siete cuentos japoneses” de Junichiro Tanizaki. Una obra maestra, excelentes todos los cuentos. Parecen experiencias propias. Lo digo por el realismo con que son contados. Apenas terminé éste, comencé con “La Enfermedad”, del escritor venezolano Alberto Barrera Tyszka, premio Herralde de novela en el año 2006. Profunda narración del comportamiento del ser humano ante la enfermedad, la eterna negación de que la muerte está allí, siempre a nuestro lado.

En esta nueva etapa laboral que estoy viviendo, me recomendaron ampliamente una lectura. Se trata de “Los Cuatro Acuerdos”, un libro escrito por el mexicano Miguel Ruiz, basado en la sabiduría tolteca. Los toltecas, decían que “nuestras vidas no son más que un sueño, cuyo creador es uno mismo”. Recuerdo con estas palabras aquella canción llamada Acuarela, de Toquinho, sobre todo cuando dice que "el futuro es una acuarela y tu vida un lienzo que colorear".

El libro está completamente agotado en Caracas, así que por lo pronto, sólo les puedo dejar un breve resumen que me han hecho llegar por correo, y que describe los cuatro acuerdos, con los cuales podemos alcanzar, entre otras cosas, la paz interior:

1.- No supongas.

No des nada por supuesto. Si tienes DUDA, aclárala. Si sospechas, PREGUNTA...suponer te hace inventar historias increíbles que sólo envenenan tu alma y que no tienen FUNDAMENTO.

2.- Honra Tus palabras.

Lo que sale de tu boca es lo que eres tú. Si no honras tus palabras, no te estas honrando a ti mismo, y si no te honras a ti mismo no te amas. Honrar tus palabras es ser coherente con lo que piensas y con lo que haces. Eres auténtico y eso te hace respetable ante los demás, y ante ti mismo.

3.- Haz siempre lo mejor.

Si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte ni arrepentirte de nada.

4.- No te tomes NADA personal.

Ni la peor OFENSA, ni el peor DESAIRE, ni la más grave HERIDA. En la medida que alguien te quiere lastimar, en esa misma medida ese alguien se lastima a si mismo. En ese caso, el problema es de él, y no tuyo...

Gracias a todos por venir a leerme, en esta casa virtual se les recibe con gran cariño y se les agradece por la buena vibra que traen. Se les quiere mucho por estos lares de Dios...

Saturday, August 04, 2007

¡Para mi querida Cerecita!

Hace poco fui sacudido por una noticia que me dejó sin capacidad de reacción, no sólo por lo que ello implica, que ya es bastante, sino por la fortaleza mostrada en esas letras tan bonitas que escribió para enterarnos de su mal.

“Tengo cáncer”.

Inmediatamente le escribí, y al día siguiente ya estábamos conversando.
Me dejó más sorprendido aún por su madurez espiritual. Me confieso estupefacto ante tanta alegría por la vida, tanto amor para dar en un solo ser.

Luego vino lo de rigor, exámenes por aquí, exámenes por allá, costosos, porque me consta que lo son, y dolorosos también, pero necesarios. Una intervención quirúrgica.

Ella lo asumió con una valentía poco común. Y no es que no tuviese miedo, porque todos, en mayor o menor grado, tenemos miedo, mucho más cuando se trata de nuestra salud, o es nuestra vida lo que está en riesgo.

Me imagino que exteriorizó muchas emociones, tristeza, alegría, llanto, desesperación, esperanza, y por sobre todas las cosas, un espíritu indomable, característico de los grandes guerreros samurai.

Ella es así, mientras más la voy conociendo, más voy quedando sorprendido por todo lo que encierra un ser humano dentro de sí.

Llegué a ella a través de la red, no se cómo ni porqué, pero un buen día estaba leyendo su blog. Tiene una forma muy sui generis de dejarnos un mensaje constructivo en todo lo que escribe. Admito que es difícil, a partir de sus escritos, desvelar el extraordinario ser humano que hay allí. Leí con fruición post tras post. Me tomé mi tiempo porque ella escribe desde el 2004. Es madura como ella sola. Mordaz. Aguda. Sagaz. Inteligente. Solo hay que desvelarla, y allí está, con toda su ternura, con toda su alegría, sus ganas de dar, de vivir.

Este año, finalmente, nos pudimos conocer. Nos lo habíamos prometido, pero con lo metido que está cada uno en sus actividades no se había podido cuadrar el encuentro. Miguel vino de Holanda y decidimos tomarnos un café para conversar. Allí me dio la buena noticia. “Cereza viene” dijo, sin inmutarse. Y a pesar de que traté de no expresarme no pude disimular mi alegría. Y apareció. Toda ella. Desparramando alegría, sonrisas y carcajadas, cuentos, de los cuales tiene un arsenal. Reímos a más no poder. Y pude al fin confirmar, una vez más, que las letras no mienten, y nos muestran tal como somos si nos saben leer entre líneas.

Las cosas van por buen camino. Lo constaté por su sonrisa, que permanece intacta.

Querida Cereza, no estás sola en esto, tus amigos estamos allí cuando quieras, sólo tienes que llamar, y como dice James Taylor, o Carol King: “…and I´ll be there, you´ve got a friend…”