Sunday, May 17, 2009

Una oración por la lluvia


Es el título del más reciente libro que ha caído en mis manos. Se trata del testimonio de un reportero polaco, Wojciech Jagielski, fruto de diez años de visitas a Afganistán. De ese libro dijo Ryszard Kapuscinski “¡Qué libro tan extraordinario, emocionante y bello!”. Es uno de los regalos de cumpleaños que recibí de alguien que me aprecia mucho y me entiende, porque yo tenía muchas ganas de leerlo.
Me mata la curiosidad por saber de Afganistán, un país cuya área es equivalente a la del estado de Texas, en Estados Unidos, que fue invadido por los rusos, quienes se mantuvieron allí por diez años, en apoyo de un régimen comunista imperante en esos años hasta que se vieron obligados a retirarse, diezmados por la guerra de guerrillas a la que estuvieron sometidos. Un país cuya geografía montañosa en un 75% no le permitió mayores libertades a los rusos para desarrollar su ofensiva. Un país cuyas tierras cultivables cubren apenas el 12% del territorio. Luego de la salida de los soviéticos se impuso un régimen islámico que fue desalojado del poder por una coalición internacional liderada por Estados Unidos, que no las han tenido fáciles, por razones similares a las que provocaron la salida de los rusos.
El país tiene una posición geopolítica interesante para las grandes potencias pues, entre otras razones, es un país que acorta enormes distancias a los gasoductos que suplen a Europa. Posee inmensas riquezas minerales no exploradas en su totalidad ni explotadas aún, como petróleo y gas.
Es el mismo país donde en 1984 el fotógrafo Steve McCurry, de la revista National Geographic, tomó la imagen de una chica de ojos verdes, refugiada de guerra, llamada Sharbat Gula, una de las portadas más famosas de todos los tiempos para la revista. Mc Curry se tomó la idea de buscar la chica a posteriori, y de hecho al consiguió en 2001.
El mismo de la destrucción, por el régimen talibán, de unas estatuas de Buda que datan de hace más de 1500 años, las cuales están ahora en proceso de reconstrucción. El lugar de la destrucción de las estatuas es Bamiyán. Supe de ese lugar en 2001, mientras me encontraba en Yokohama, Japón. Era el nombre de un restaurant de comida asiática extraordinario, cuyos empleados no pudieron satisfacer mi curiosidad sobre el nombre por ser de origen chino y no hablar japonés ni inglés. Allí, en ese sitio, quien habla es la extraordinaria comida, pero ese es tema de otro post.
Lo cierto es que me quedó el nombre de Bamiyán en la mente hasta que pude investigar y descubrir que se trataba de un lugar en Afganistán, considerado patrimonio cultural de la humanidad, gracias a los Budas esculpidos en piedra. Se encuentra en la famosa ruta de la seda, y muy cerca de la hermosísima región de Cachemira, tan bella como conflictiva a través de los años.
Otro caso que puso a Afganistán en el foco de mi atención es el hecho de que allí se dice que se oculta Osama Bin Laden. La CIA ha utilizado a científicos norteamericanos que han investigado en sus montañas para tratar de descifrar el paradero de Bin Laden, de acuerdo con el tipo de roca de las montañas que se observan como fondo en sus videos transmitidos por la cadena Al Jazeera.
El libro ”Una oración por la lluvia. Historias de Afganistán” (Random House Mondadori, 2008) ha venido a cubrir un vacío, una asignatura pendiente. A juzgar por la rica prosa de sus comienzos, creo que lo voy a disfrutar bastante.

*Imagen: Steve McCurry en "National Geographic".

8 comments:

Pansy said...

No tengo la menor duda de que lo vas a disfrutar, asi que espero tus enseñanzas despues de "devorartelo" ... Espero hayas pasado un bonito dia de cumpleaños!
Te mando un abrazo muy fuerte y m buena vibra!

Waiting for Godot said...

Me parece muy interesante, ya me pico la curiosidad. Pero lo de las fotos de la chica el antes y el despues, yo creo que hablan por si solas, su rostro es el rostro de quien no la ha pasado bien en la vida, porque no hay tanto tiempo de diferencia para tanta diferencia. Besos Oswaldo.

La Hija de Zeus said...

Con ese entusiasmo es seguro que lo disfrutaras!!

un abrazo

Oswaldo Aiffil said...

Hola Pansy! Feliz de verte por estos lares de Dios! De verdad que la prosa del libro es atrayente, sumado al tema, lo hacen un verdadero manjar. Ya te contaré. Gracias por tu buena vibra y mejores deseos. Lo pasé muy bien rodeado de gente bonita. Un beso!

Hola mi tierna Waiting! Me interesan mucho esos temas, como el árabe-israelí, y éste de Afganistán. Las fotos de Mr. McCurry son fantásticas. La de la izquierda fue tomada en un campo de refugiados. La mirada de la chica de los ojazos verdes es la mirada de la guerra. Ya el sufrimiento se había hecho cargo de ella para ese entonces. Triste de verdad. Un beso grande Waiting!

Zeucita linda! Seguro es que lo estoy disfrutando, un bonito regalo sin lugar a dudas. TQM, un beso grande!

Anonymous said...

Espero que reamente lo estés disfrutando!

Oswaldo Aiffil said...

Hola Mariale! Realmente lo disfruto mucho! Un beso enorme!

Ross said...

Hola Oswaldo he estado alegada de la blogosfera atendiendo asuntos personales, de vez en cuando paso por casi en serio y hoy al ver tu comentario, me dio nostalgia de esos días intensos de blogear y entre mis blog favoritos por supuesto el tuyo, vine a visitarte y pasearme un ratito entre tus post ...voy a ver si busco este libro en la biblioteca..el post de hablarse a uno mismo me cayo como anillo al dedo ando en ando en una de ver como reestructuro mi vida y logro las metas y veo el presente como positivo y valorar más lo espiritual que lo material, besitos y un gran abrazo con el cariño de siempre :)

Oswaldo Aiffil said...

Hoooolaaa Roossweeeell!!! Que de tiempo sin saber de ti!!! Qué alegría me da saber que estas muy bien!!!
Te deseo todo lo mejor, a ti, a tus hijos y tu esposo, que les vaya de lo mejor! Sabes que siempre tienes una casa aqui. Te quiero muchoooooo!!!!!